"MARIPOSILLAS NEGRAS"

Como pequeños inceptos
que baten y rebaten
sus alas con afán,
así quiero que arriben a mi estómago
mariposas centelleantes
y den ritmo a mi cuerpo.
De su fiel bamboleo
me hagan una canción.
Si como dicen todos, estar enamorados
es que tu estómago entero sienta esta a-tracción,
entonces me declaro en amor de tus sombras,
de este batir constante aquí en mi corazón.
Somos simples bichitos…
Y el polen que nos sale radiante de los dedos
y hacen que este teclado se nos convierta en flor
hace beneficiario a este poema
cargadito de miel
aunque no es primavera.
Esas mariposillas que quiero pà mi estómago
que se parecen tanto al brillo de tus ojos
(quizás porque abanicas con tu aire sus alas)
quiero que se me alberguen en mi por mucho tiempo.
El tiempo necesario para decir te quiero,
el tiempo necesario para chupar tus dedos,
el tiempo en que tus dedos se me hagan necesarios,
necesarios y hambrientos, robándome deseos…
Este bichito-chip que tengo en mis pistilos
que se ha colado con fuerza, y a base de poemas
revolotea en mi,
me provoca txunamis,
me dice que la vida te da un millón de alas
pero las alas buenas crecen en la distancia,
desmigajando el tiempo,
volando bien despacio,
con la mirada fija
y en sola dirección.
Javier Bravo
Barcelona, 28 de diciembre de 2007