viernes, 27 de marzo de 2009

"A" (abducción)

para Vicente.



No sé lo que me has hecho, mi ovni favorito
que tu nave plateada ronda en mis parpadeos
cuando una estrella, cualquiera, nos sirve de refugio
de los rayos láser que, travestidos en besos,
lanzas hacia mi nave
en forma de torpedos.

Y se ha parado el mundo.
Tu voz es el consuelo que sostiene mi aire,
tus besos mojados encharcan mi desierto.
Atado de tu mano mis minutos son horas.
Horas los minutos que robo de tu lado,
intencionadamente soy mafioso en tu tiempo.
Segundos son minutos para explorar tu vello...

Y no se dónde estoy.
¿Dónde quedó mi espacio
desde que has llegado a rellenar mi cielo?
Hipnotizado y fuerte corro hacia tus abrazos,
como un zombi con insomnio que un suspiro frágil
te abraza y hasta te arropa en medio de lo oscuro,
este paranormal y rudo mundo nuestro.
.
Y tu nave plateada se vuelve confortable.
Tu risa es el mar donde se me ahogó el miedo.
Mi felicidad es tsunami invertido
donde, enketaminado, desayuno en tu cuerpo.

Y no me importa el tiempo,
y ni sé dónde vivo,
sólo en mi mejor hábitat se halla tu planeta.
Entre cráteres viejos tu mirada,
jovial,
hasta cautiva,
patidifuso y lelo
me ajena del universo.
Me veo en paralelo,
siempre en celo de ti
y hasta te compro el cielo.

Y te cojo la mano para subir contigo
a tu brillante nave,
a tu patio de luces,
a todo tu entrecejo,
a que me llenes el limbo desde donde ahora reino
con tu extraña presencia
(extraterrestre apariencia)
que me anula hasta el suelo.


JAVIER BRAVO
Madrid, 17 de marzo de 2009

No hay comentarios: